Sistema
Inmune
este tipo de inmunidad es considerado el más antiguo dentro de la escala evolutiva, por lo que está presente en el organismo de forma natural y antes del nacimiento, constituyendo la primera línea de defensa contra la infección. La inmunidad activa carece de memoria para agentes invasores y no es especifica de antígenos, de modo tal que sus respuestas son repetitivas sea cual sea el agente y con el tiempo no aumenta su eficacia en sucesivas exposiciones
Activa
Natural
Producida cuando los mecanismos inmunes propios del organismo entran en contacto directo con el agente infeccioso y forman anticuerpos específicos.
Artificial
Se origina cuando el agente patógeno atenuado o muerto, o sus derivados, son introducidos en un organismo para de esta manera generar una respuesta inmune, es decir, la formación de anticuerpos. Las vacunas contra el Sarampión, la difteria y la poliomielitis son ejemplos.
Pasiva
Este tipo de inmunidad se activan cuando la respuesta activa no es eficaz, consiste principalmente en atacar al agente extraño concreto y eliminarlo, se halla compuesta por elementos celulares (algunos trabajan en la respuesta innata) y por un grupo de proteínas globulares llamadas anticuerpos o inmunoglobulinas, éstos se encargan de la respuesta humoral, aquella que consiste en el reconocimiento de los antígenos para su posterior eliminación
Natural
Se adquiere cuando se reciben anticuerpos producidos por otro ser vivo que tuvo contacto con el agente patógeno, por ejemplo, cuando el feto recibe los anticuerpos de su madre a través de la placenta
Artifcial
Cuando la persona afectada no puede realizar una respuesta inmune y es necesario tratar directamente el agente con anticuerpo específicos, suministrados a través del suero de otros animales.